lunes, 1 de febrero de 2010

El sabor de la melancolía

A pesar de que olvidé como se vuela
en plena fuga
y que ya no se a que sabe la melancolía
( no me desvela)
y que soborné a la soledad
(hija de puta)
Puedo decir:¡estoy vivo!
(cuando es de día)

Y cuando es de noche
vivo otra vida
llena de luces
llena de sueños,

y algo
de fantasía.

1 comentario:

María Susana Dall Occhio Pais dijo...

Te diré algo, es cierto ala melancolía no se le escapa, está siempre acompaña en silencio , pero descarada, la soledad es por momentos buena compañía y sabes algo aunque no lo pensemos quizás no estamos del todo solos, siempre alguien piensa en nosotros.
De noche es otro tema, los sueños salen de recorrida nos envuelven y allí, los que llevamos la soledad y la melancolía como compañeras quizás vivimos lo que no nos da el día.Este poema lo hago mío ya que siento lo mismo que tu sientes , cada letra es mi vida día a día. Por ende me ha gustado ..demasiado.Un beso