Ella se cayó de una nebulosa astral
y fue absorbida
por un onírico delirio,
una noche disfrazada
de locura
y de carnaval...
Ella es real, tan pero tan real
como el unicornio
al que monta,
por los rincones
de mi mente
primitiva, simple
y demencial.
Ella es mi presencia racional.
De noche cuando sueño,
de día cuando pienso...
o cuando salgo un poco
de esta vida,
a respirar.
Ella es.
Ella está.
No hay comentarios:
Publicar un comentario